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Conseguir que los Hijos Disfruten de la Lectura

Conseguir que un hijo se aficione y disfrute de la lectura es un objetivo que todo padre debería esforzarse por conseguir, ya que la lectura ayudará al niño a desarrollar el lenguaje y su capacidad de comunicación, además de convertirse en la base para adquirir nuevos conocimientos. Acostumbrar a tu hijo a la lectura durante los primeros años de su vida, te ayudará a sentar las bases para que poco a poco se convierta en un lector independiente.

Si a un niño no le han leído durante los primeros años de su vida, será más difícil que luego se aficione a la lectura.

Lo habitual es que un niño aprenda a leer en la escuela. Por ese motivo, suele asociar la lectura con la obligación y no con el placer, lo cual conlleva que a menudo pierda la motivación y las ganas de leer. Con la pérdida de esta motivación, muestran desinterés y falta de curiosidad. En este contexto, es importante que te intereses por ayudar a tus hijos a disfrutar de la lectura y será una de las cosas más importantes que puedes hacer como padre para ayudar a ti hijo a que incorpore hábitos que le serán de gran utilidad a lo largo de su vida.

Seguramente la forma más eficaz para alentar a tus hijos a que se aficionen y disfruten de la lectura será leer en voz alta junto a ellos, y cuanto antes se empiece, mejor. Esta costumbre será beneficiosa incluso para niños realmente pequeños, como es un bebé de pocos meses, ya que podrán ver fotos, escuchar tu voz, y familiarizarse desde muy pequeño con la lectura.

La idea de compartir un momento de lectura junto a tus hijos puede hacer de ese instante un momento muy especial, especialmente si se evitan otras distracciones como la televisión o el teléfono. Aunque tus hijos ya puedan leer por sí solos, y salvo que sean ya mayores, no dejes de leerles en voz alta. El tiempo que compartís juntos seguirá fortaleciendo el vínculo entre ambos y su interés por la lectura. Es importante señalar que los niños imitan las actitudes de sus padres, por lo que si ven que a ti te gusta leer libros y los tratas con cuidado y respeto, es probable que ellos hagan lo mismo.

Para que tus hijos aprecien la lectura, deberás hacer de la lectura un acto simple, cotidiano y cercano. Sólo con tener libros, revistas, y periódicos alrededor de tu casa ayudarás a los niños a verlos como parte de la rutina diaria. Una buena idea es destinar algún lugar de la casa para que ellos puedan guardar los libros. Si tienes niños pequeños, trata que siempre haya libros al alcance de su mano y que no deban depender de ti para que se los des.

Compra los libros adecuados a las edades de tus hijos. Si tienes hijos muy pequeños, intenta que los libros sean resistentes a los golpes, mordiscos, y a otros aspectos a los que pueda someterles tu hijo. En el mercado, hay disponibles libros plastificados que son muy apropiados para que tengan los más pequeñitos.

Una buena actividad para compartir con tu hijo será la elección de un libro. En cualquier librería, hay miles de ejemplares en las estanterías, por lo que la tarea de elegirlos junto a tu hijo puede ser muy estimulante para ambos. También puedes informarte acerca de los nuevos libros infantiles en la
Asociación Americana de Bibliotecas.

Una de las mejores ayudas podrás encontrarla en la biblioteca de la zona en la que vives. Si tus hijos están en edad escolar, ten en cuenta que la biblioteca de la escuela es otra fuente excelente para que los niños tengan diferentes libros al alcance de su mano. Estimula a tus hijos a que traigan a casa libros de la biblioteca del colegio. Esto no debería limitarse únicamente a los libros que utilicen para realizar sus tareas escolares, sino también a aquellos que elijan por interés o por placer. En caso de necesitar ayuda, se puede pedir al bibliotecario que ayudará a localizar libros específicos, como por ejemplo libros que son buenos para la lectura en voz alta o libros adecuados para determinadas edades. La posibilidad de mirar, buscar conversar y discutir con tu hijo acerca del libro que leerá puede ser una experiencia especialmente enriquecedora para ambos.

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